viernes, 19 de septiembre de 2008

Ya no

Ese mundo que con tan solo palabras inventaste.
Ese guante que me arropó sin querer.
Y tú, con tu vida, has partido ya.
Nada podré hacer sin tu mar.
Quizás otra chance, otro consejo.
Otra brisa...
Eterno pero frágil amar.

El seno del olvido es irrompible.
Sólo tu sombra alcanzaré.
Mis verdades cayeron desnudas frente a ti.
Y no me creo capaz de perecer.

Sólo en tus ojos yo puedo creer.
Aunque no lo vea, las hojas van cayendo.
Su quejido es escuchado por el viento,
quien ya no puede volver el amanecer.

Las miradas que me vigilaban
no reconocen su derrota.
Tu resplandor, tan claro a través del cristal.
La noche ya no caerá ante ti.

El parecer de tu alma,
tan incómoda ya sin cuerpo.
No tendrá ya más memoria,
no tendrá ya más secreto.

La censura en tus ojos,
todo eso que no quieres ver.
Y mis ojos, desentendidos,
se dejan morir en su propia oscuridad.

El llanto que irradia la luna,
la niebla invade mi habitación.
El redescubrimiento de ese mundo,
esas paredes simulan ficción.

Pero yo ya no soy...
Aquella persona, ya no...

La imposibilidad abrumadora.
Ese camino está fuera de rumbo.
Las aves ya no cantan.

Durmiendo esperaré...
Enceguecido y tranquilo ya...



Hache
(cosecha 2003, creo)


1 comentario:

carmela dijo...

Es escalofriante cuando uno descubre, asume, admite y hasta acepta que "ya no".
uffff.