sábado, 24 de julio de 2010




Eli no habia venido esa tarde.
Ya eran las doce pasadas y estaba al lado de la ventana con el alma en un puño. Dejo la ventana entreabierta, respirando el aire frio de la noche. ¿Era realmente solo por ella por lo que habia decidido empezar a defenderse? ¿No se trataba de si mismo? Si. Pero por ella.

Dejo la ventana un poco abierta con la vaga esperanza de que ella volviera aquella noche. Lo llamara. Si podia salir en mitad de la noche, tambien podria volver en mitad de la noche.
Oskar se desvistio y se acosto. Dio unos toquecitos en la pared. Sin respuesta. Se puso la remera por encima de la cabeza y se puso de rodillas en la cama. Entrelazo las manos y, apoyando sobre ellas la frente, susurro:
"Por favor, Dios bueno. Deja que ella vuelva. Te doy lo que quieras. Todos mis libros, todos mis discos, todas mis cosas. Lo que quieras. Pero haz que ella vuelva. A mi. Por favor, Dios, por favor".

(...)


-: Oskar. Oskar...

Abrio los ojos. El globo terraqueo estaba apagado y la luz de la luna volvia todas las cosas de color azul. Gene Simmons lo miraba desde la pared de enfrente, sacandole su lengua larga. Se acurruco, cerro los ojos. Entonces volvio a oir el susurro.

-: Oskar...


Venia de la ventana. Abrio los ojos, miro hacia alli. Al otro lado vio el contorno de una cabeza pequeña. Se quito la remera, pero antes de que tuviera tiempo de salir de la cama, Eli susurro:

-: Espera. Quedate en la cama. ¿Puedo entrar?

Oskar susurro:

-: Siii...
-: Di que puedo entrar.
-: Puedes entrar.
-: Cierra los ojos.

Oskar cerro los ojos. La ventana se dio la vuelta hacia arriba; una corriente fria recorrio la habitacion. La ventana se cerro con cuidado. Oyo como respiraba Eli, susurro:

-: ¿Puedo mirar?
-: Espera.

Una mano fria se deslizaba sobre su cintura, se puso sobre su pecho, sobre su corazon. El la apreto entre sus dos manos, la calento. La otra hurgo bajo su axila, subiendo por su pecho y colocandose entre sus manos. Eli giro la cabeza y puso la mejilla sobre su espalda.

-: Eli, ¿tengo alguna posibilidad contigo?

Ella se dio vuelta, se subio la frazada hasta el menton.

-: ¿Que quiere decir eso?

Oskar fijo la mirada en los lomos de los libros que tenia delante de el, encogiendose de hombros.

-: Que si quieres que salgamos juntos, y eso.

-: ¿Como juntos?

Su voz sonaba recelosa, dura. Oskar se apresuro a decir.

-: A lo mejor tu ya tienes un chico en la escuela.

-: No, pero...Oskar, yo no puedo...No soy una chica.

Oskar se rio.

-:¿Que dices? ¿Eres un chico, o...?

-: No. No.

-: ¿Entonces que eres?

-: Nada.

-: ¿Como que nada?

-: No soy nada. Ni un niño. Ni un viejo. Ni un chico. Ni una chica. Nada.

Oskar paso el dedo sobre el lomo de un libro, apretando los labios, negando con la cabeza.

-: Entonces, ¿tengo alguna posibilidad contigo?

-: Oskar, me gustaria mucho, pero...¿no podemos estar juntos asi como estamos?

-: ...Si.

-: ¿Estas triste? Podemos besarnos, si quieres.

-: No.

-: ¿No quieres?

-: No, no quiero.

Eli arrugo la entreceja.

-: ¿Hace uno algo especial con quien tiene una posibilidad?

-: No.

-: ¿No es mas que lo normal?

-: Si.

Eli se puso muy contenta, entrelazo las manos sobre el estomago y miro a Oskar.

-: Entonces tienes una posibilidad conmigo. Entonces salimos juntos.

-: ¿De verdad?

-: Si.

-: Bien.

Con una alegria serena Oskar siguio mirando los lomos de los libros. Eli estaba quieta, esperando. Despues de un rato, dijo:

-: ¿No hay nada mas?

-: No.

-: ¿No podremos estar acostados como antes?

Oskar se dio la vuelta de espaldas a ella. Eli lo rodeo con los brazos, el le tomo las manos entre las suyas. Estuvieron asi hasta que Oskar empezo a tener sueño. Le ardian los ojos y era dificil mantener los parpados abiertos. Antes de quedarse dormido dijo:

-: ¿Eli?

-: ¿Mmm?

-: Has hecho bien en venir.

-: Si.

-: ¿Por que...hueles a gasolina?




Las manos de Eli apretaron con fuerza sus manos, su corazon. Abrazandolo. La habitacion se hizo mas grande alrededor de Oskar, las paredes y el techo se ablandaron, el suelo desaparecio y, cuando sintio como la cama se deslizaba libremente en el aire, comprendio que se habia dormido.
















Buscapies.

1 comentario:

El Lapiz dijo...

Deja entrar el dia, la luz, y suelta mi vida.